Capítulo 13
Capítulo 13
Capítulo13
-¿¿Beatriz? -la calmó Alejandro.
-¡Alejandro! ¡Ayúdame por favor! -pidió Beatriz con lágrimas en los ojos-. Estoy abajo del edificio
del Grupo Hernández… ¡Los reporteros me están acosando! Tengo miedo!
-¡Voy a bajar a recogerte! -Alejandro no dudó y se puso su saco.
-Señor Hernández, no puede hacer eso–César se apresuró a detenerlo.
-Envie a sus guardaespaldas a recoger a Beatriz. Si va usted, los reporteros lo atacarán.
Alejandro frunció el ceño y, sin vacilar, salió corriendo.
-¿Cuándo es la fecha de la boda entre usted y el Señor Hernández, señorita Beatriz?
-Según los informes, usted y el Señor Hernández se conocen desde la infancia, ¿es eso cierto?
¿Qué opinas de la ex esposa del Señor Hernández? Según los informes, ella intervino en su
relación, ¿es verdad?
Las cámaras de los reporteros apuntaban a la cara de Beatriz y, aunque los guardaespaldas intentaban protegerla, la escena era bastante caótica. Beatriz mostraba una actitud mansa y dulce, y en realidad estaba muy feliz. Ella fue quien dio a conocer la noticia de la boda a los medios de comunicación, y si Irene era la tercera en discordia, también había sido idea suya.
Esa mujer despreciable se atrevió a robar su pulsera, humillarla, y ella quería hacer que se convirtiera en una amante maldecida por miles de personas.
-Gracias por su preocupación, si tengo buenas noticias con Alejandro se las comunicaré de inmediato. En cuanto a la ex esposa de Alejandro, Irene, sé muy poco de ella. Por favor, no la ataquen más. Después de todo, ella y Alejandro ya se han separado. Déjenla vivir en paz. 1
En lugar de apaciguar a los reporteros, su respuesta los animó más, y la escena se volvió aún más
caótica.
Cuando Beatriz estaba muy asustada y retrocediendo, un pecho sólido la protegió, luego la tomó
del hombro y la llevó rápidamente hacia la puerta.
-Alejandro, finalmente has venido–los ojos de Beatriz brillaban con lágrimas, como si quisiera Horar. Pero Alejandro estaba frío y callado.
De repente, se detuvo y miró a su alrededor. Tenía la sensación de que Irene estaba cerca, observando todo lo que estaba sucediendo. Pero, ¿cómo podría ser posible? La cámara en la entrada del Grupo Hernández se movió ligeramente. Clara estaba sentada en su oficina, viendo todo lo que sucedía fuera del edificio del Grupo Hernández. Vio a Beatriz y Alejandro salir juntos, vio a
Si alguien le preguntara si no le dolía el corazón, nadie creería su respuesta.
-Alejandro, realmente la proteges. ¿Alguna vez me has protegido a mí? -Los ojos de Clara se pusieron rojos–Hace dos años, en una noche de tormenta, cuando estaba a punto de morir de dolor,
también te llamé.
Sabía que no vendrías, pero solo esperaba que respondieras mi llamada. Pero lo que recibí fue el sonido del teléfono apagado. Pensar que te he amado con todo mi corazón durante tres años, para
que al final solo seas una herramienta para aplazar el tiempo y para que le hagas caso a tu abuelo. No vales la pena, Alejandro, eres lo peor que me ha pasado en la vida.
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En este momento, la Oficina Confidencial de la Familia Peréz recibió otro mensaje.
Diego: Clara, el presidente de Diario de la Ciudad de México que fue el primero en publicar la noticia, ha sido destituido por tu exesposo. Parece que la noticia fue publicada por su novia y no tiene nada que ver con él. 1
Clara parpadeó con sus largas pestañas y escribió:
Marido y mujer, no hay separación entre nosotros.
Javier: ¡Exacto! Son iguales.
Javier: Clara, acabo de encontrar una noticia importante, te lo diré en privado. Sebastián: Dilo aquí.
Javier: ¡No! Lo encontré yo mismo, no intenten colgarse de mi éxito. Si quieren encontrar algo, háganlo ustedes mismos.
Luego, Javier le envió un mensaje de voz.
-Pequeña hermana, encontré algo interesante sobre Beatriz.
Javier era un fiscal aparentemente desaliñado, pero solo sus otros hermanos y Clara sabían que era un experto en tecnología de hacking, no tan bueno como Sebastián, pero muy poderoso y con una gran capacidad de investigación. Ningún delincuente que pasara por sus manos había
escapado.
¡Lo mismo ocurre con Beatriz! Aparecieron varias fotos en WhatsApp. ¡Sorprendentemente, son fotos de Beatriz besándose con un hombre mestizo con ropa reveladora!
-Javier, eres bueno en tecnología de computadoras.
Clara silbó y miró las fotos con satisfacción.
-¿De dónde las sacaste?
-Estaban en la lista de seguidores de Beatriz en Instagram. Hay cientos de personas allí, y los he estado revisando uno por uno durante estos días. Luego encontré a este hombre sospechoso y
hombre es entrenador físico y tiene muchos seguidores.
-Javier, gracias por tu arduo trabajo. Te invitaré a cenar esta noche.
-¿Solo cenar? ¿No vamos a beber?
-¡Vamos a beber!
-No te emociones demasiado, tengo algo más impactante aquí, incluso yo me asusté.
Javier le envió un informe de diagnóstico médico, seguido de varias fotos del abdomen de las
mujeres.
-¿Qué es esto? -Clara se sorprendió.
-¿Puedes creerlo? Beatriz tuvo un hijo en Estados Unidos, y estas fotos son las marcas que quedaron después del parto.
Clara tembló de repente. Luego amplió las fotos y las revisó varias veces con cuidado.
Esa mujer no está enferma en absoluto. Ha estado yendo al hospital una y otra vez, pero en realidad ha acudido al departamento de cirugía plástica para eliminar esas marcas en su
estómago.
-Ah, la tecnología moderna es realmente útil para estas personas malvadas. He estado trabajando en casos durante tantos años, he escuchado casos de intercambio de pruebas de paternidad, pero es la primera vez que escucho sobre eliminar marcas de embarazo. 1
-En otras palabras, Beatriz y Alejandro aún no han tenido relaciones sexuales. De lo contrario, ella ya habría mostrado su verdadera cara- Clara suspiró aliviada, sintiendo cierta complejidad en su
corazón.
Después de todo, había amado a Alejandro durante trece años. Necesitaba tiempo para asimilar todo esto. Pero no importaba cómo se sintiera, nunca volverá a querer a Alejandro.
-Esa perra te ha intimidado. Deberíamos publicar estas fotos en línea y enseñarle una lección.
Javier estaba ansioso por matar a Beatriz.
-Cuando era niña, tenía la costumbre de dejar lo mejor para el final.
Clara entrecerró los ojos.
-El ataque especial debe ser guardado para un momento crucial. Solo entonces tendrá poder
destructivo. 2